Amazon.com pagó casi mil millones de dólares para adquirir la startup de videos en vivo Twitch Interactive en 2014. Una década después, el gigante minorista ha recibido poco retorno financiero de una de sus adquisiciones más grandes. Twitch, conocida por sus transmisiones de videojuegos de varias horas de duración, sigue sin ser rentable a pesar de sus períodos de popularidad explosiva, según empleados actuales y anteriores con conocimiento de sus finanzas.
Los documentos vistos por The Wall Street Journal muestran que los usuarios que más pagan de Twitch están abriendo menos sus billeteras, y los datos de terceros reflejan que el crecimiento de nuevos usuarios y la participación se ha desacelerado. Tras dos rondas de despidos el año pasado, a los empleados les preocupa que pueda haber una tercera ronda este otoño tras una revisión operativa anual, según personas familiarizadas con el asunto. El director ejecutivo de Amazon, Andy Jassy, ha liderado una revisión de la rentabilidad de la empresa y ha mostrado poca tolerancia con los negocios no rentables.
La falta de rentabilidad de Twitch se debe a varios factores, incluyendo los altos costos operativos y la intensa competencia en el mercado de transmisión en vivo. A pesar de sus esfuerzos por diversificar y atraer más anunciantes, la plataforma no ha logrado convertir su popularidad en ingresos sostenibles. Esto plantea un desafío significativo para Amazon, que esperaba que Twitch se convirtiera en un pilar de su estrategia de entretenimiento digital.
Twitch, que sigue siendo una pequeña parte de Amazon, continúa recibiendo millones de visitantes al día. Sin embargo, su modelo de negocio es complicado. Permitir decenas de miles de transmisiones en vivo simultáneas es costoso y la empresa ha tenido que invertir en herramientas para moderar el contenido. Los expertos afirman que el contenido en sí mismo plantea desafíos, ya que los videos en vivo de larga duración no se alinean bien con la venta de anuncios.
En conclusión, la adquisición de Twitch por parte de Amazon, aunque inicialmente prometedora, no ha cumplido con las expectativas financieras. La plataforma enfrenta desafíos significativos para convertir su popularidad en ingresos sostenibles. La continua falta de rentabilidad, junto con la desaceleración en el crecimiento de usuarios y la participación, plantea preguntas sobre el futuro de Twitch en la estrategia de Amazon.